Clickbait es el nombre que recibe una controversial estrategia publicitaria para la publicación de contenido online, a través de la cual se brinda un titular o thumbnail (imagen de vista previa) particularmente shockeante, atractivo o intrigante con el único propósito de atraer más clicks hacia el contenido.
Las acciones de clickbait tergiversan el contenido al que supuestamente representan y buscan generar una respuesta emocional por parte del lector. Su equivalente en el periodismo tradicional sería el periodismo sensacionalista, también conocido como «prensa amarilla».
¿Cómo nació el Clickbait?
A diferencia de los periódicos impresos tradicionales, los medios periodísticos online generalmente no cuentan con ingresos producto de la compra del periódico por parte de los lectores, lo que los obliga a depender exclusivamente de la publicidad como fuente de ingresos. Y el ingreso publicitario está directamente relacionado a la audiencia, es decir, al caudal de tráfico que el medio tiene.
Capturar la atención del público online se convirtió en vital para estos medios, y particularmente difícil en un contexto de sobreinformación, lo que dio origen al fenómeno conocido como economía de la atención. Algunos medios lisa y llanamente dejaron de siquiera intentar brindar contenido de calidad, y comenzaron a crear contenido «viralizable», diseñado para ser compartido en redes sociales. El ejemplo más icónico de esta tendencia es BuzzFeed, cuyos artículos tienen titulares llamativos, y el contenido consiste en imágenes o «memes» al azar tomados de internet.
Tipos de clickbait
Algo que es común a todas las prácticas de clickbait es la de brindar información que tergiversa o exagera el contenido real del artículo o video que se verá.
Los titulares redactados como clickbait generalmente buscan despertar la curiosidad del lector, con expresiones ambiguas como «No creerás lo que encontramos» o «Lo que verás te sorprenderá». El uso de nombres de celebridades es también muy común, especialmente si están acompañados de alguna acción escandalosa reciente o algún secreto o revelación sobre esa celebridad: «No creerás el último escándalo de Miley Cyrus» o «El secreto inconfesable de Bill Gates para hacer millones».
El recurso a contenido de tipo sexual es otra de las prácticas más habituales de clickbait, especialmente en videos. Es habitual utilizar thumbnails que muestran fotos sugerentes para ilustrar videos que en realidad no contienen ningún material de esa clase. La combinación de títulos y thumbnails creados con el único fin de atraer clicks es particularmente popular en videos de YouTube.
Otra modalidad de clickbait es la creación de contenido que es simplemente falso. Algunos youtubers, por ejemplo, han sido descubiertos presentando impresionantes «cámaras ocultas» que en realidad son falsas y habían sido filmadas con actores pagos.
¿Conviene utilizar Clickbait?
Afortunadamente, el uso y abuso del Clickbait ha provocado que diversas plataformas hayan comenzado a tomar medidas para penalizar el contenido que incurre en este tipo de actividades. El público está, además, cada vez más informado acerca de qué es el clickbait y en muchos casos ha comenzado a exponer a los medios y creadores de contenido que incurren en esto.
Si bien el clickbait es un caso extremo y debe evitarse, cabe señalar que brindar titulares o imágenes meramente descriptivos suele ser aburrido. El contenido atractivo y atrapante es de por sí necesario para capturar la atención del público en su justa medida, es decir siempre cuidando de no falsear o exagerar información.