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El 10 y 11 de diciembre se llevó a cabo una cumbre del Consejo Europeo, donde Emmanuel Macron y otros líderes del bloque se reunieron
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Las autoridades del Viejo Continente reafirman que en el evento se siguieron todas las medidas de prevención sanitaria contra la COVID-19
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Para el cierre del miércoles, Francia ya había reportado más de 17 mil nuevos casos, así como 289 fallecimientos, en menos de 24 horas
De acuerdo con El Financiero, la oficina de la presidencia de Francia informó que Emmanuel Macron, mandatario de la nación europea, acaba de dar positivo a COVID-19. De acuerdo con un comunicado, se espera que el funcionario continúe trabajando los próximos días. Pero, ya que presenta síntomas, se aislará al menos durante los próximos siete días. No se dieron más detalles específicos sobre su estado de salud o cómo está evolucionando la enfermedad.
Lo que sí se dio a conocer es que los síntomas que le ha provocado la COVID-19, hasta ahora, son leves. El tema se volvió rápidamente tendencia en Twitter, y ya era el tercer tema que más se discutía en México para las 8:22 horas, con más de 59 mil publicaciones. Boris Johnson, el primer ministro de Reino Unido, le deseó una rápida recuperación a Macron. Cabe destacar que el funcionario británico también fue víctima de este virus durante la primera mitad del año.
Sorry to hear my friend @EmmanuelMacron has tested positive for coronavirus. We are all wishing you a speedy recovery.
— Boris Johnson (@BorisJohnson) December 17, 2020
También de acuerdo con El Financiero, se espera que otros funcionarios europeos, dentro y fuera de Francia, se aíslen en las próximas horas por haber estado en contacto con Macron. El primer ministro del país, igual que la esposa del presidente, dio negativo pero entrará a una cuarentena preventiva. También los primeros ministros de España y Portugal se aislarán los próximos días. Lo mismo hará el presidente del consejo de líderes de la Unión Europea (UE).
Una señal de la gravedad del rebrote de COVID-19 en Europa
La noticia de Macron llega en un momento en el que la pandemia está agravándose dentro de Francia. De acuerdo con Euronews, recientemente se levantó una cuarentena obligatoria que se había establecido para frenar el aumento radical de casos. Sin embargo, todavía se le ha exigido a la población que respete medidas como un toque de queda. Lo anterior no solo ha causado una reticencia de la audiencia, sino también de grupos de comerciantes y marcas.
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El hecho que el mandatario francés haya enfermado de COVID-19 es una clara señal de qué tan grave es ahora la situación de la pandemia. De hecho, varios agentes están de acuerdo que la ola de casos es, en esta ocasión, mucho peor que a inicios del año. Según Arab News, se puede explicar el fenómeno con la relajación de las medidas. Al reducir las restricciones en verano, la población europea permitió que el virus volviera a extenderse con mayor velocidad.
Asimismo, parece que los países de Europa no aprovecharon adecuadamente la reducción de casos para prepararse para una nueva ola. De acuerdo con DW, la Organización Mundial de la Salud (OMS) reprobó que naciones en la UE no aprendieran del caso asiático. Es decir, que se limitaron a levantar las restricciones en verano, pero no aprovecharon para crear un entorno de salud mucho más sólido. Esto llevó a la situación actual de COVID-19 que enfermó a Macron.
¿Una oportunidad para que Francia se tome la enfermedad más en serio?
De nuevo, hay que recordar que Macron no es el primer caso de infección por COVID-19 en el líder de una nación. Donald Trump, Jair Bolsonaro y Boris Johnson fueron tres casos notables, pues todos ellos tendieron a no tomarse la enfermedad tan en serio antes de ser infectados. En el caso del presidente de Brasil, después de su caso se vieron medidas ligeramente más estrictas. Algo similar ocurrió con el primer ministro británico, que incluso fue hospitalizado.
Por supuesto, Donald Trump fue todo lo contrario. En cuanto se enfermó de COVID-19, recibió un tratamiento experimental que le permitió recuperarse rápidamente de su cuadro clínico. Lo anterior de hecho reforzó su retórica de minimizar la enfermedad. No solo salió del hospital antes de lo que debería, poniendo en riesgo a otros empleados de la Casa Blanca. Además dió varias declaraciones públicas en las que dijo que el padecimiento no es tan serio como pintan.