Con un comercio centrado en el mundo digital, las estafas han crecido de manera exponencial. De la misma manera que las marcas encontraron una nueva oportunidad para conectar con sus audiencias de interés, los ciberdelicuentes hicieron lo propio y ahora este fenómeno se ha traducido en un problema para firmas comerciales como Google o Adidas. Su reputación está en juego.
Y es que estas marcas, junto con Dropbox se ubican entre las marcas más utilizadas para realizar estafas y fraudes online.
Cuando menos así lo advierten los datos entregados por el ranking de marcas más suplantadas durante 2020 que es parte de un informe realizado por IBM Scurity.
Como era de esperarse, con todas las actividades productivas enfocadas en el ámbito digital, los fraudes en internet también se incrementaron.
Pero no sólo esto. A decir del Índice de Inteligencia de Amenazas X-Force 2021 de IBM Security, durante el año pasado los ciberataques evolucionaron ante una situación sin precedentes y que nadie esperaba.
En este punto, de acuerdo con la fuente antes citada, este tipo de ataques tuvieron especial presencia en las industrias manufacturera, energética y al sector sanitario, sectores cuyos problemas de ciberseguridad se duplicaron durante el año pasado en comparación con lo registrado en 2019.
De manera puntual, el informe indica que marcas como Google, Dropbox, Microsoft, Amazon y PayPal se encuentran dentro del top 10 entre las firmas comerciales más utilizadas para realizar estafas online, mediante métodos de suplantación.
En la séptima posición se encuentra Adidas, lugar que pudo ser consecuencia del interés que generaron entre los compradores sus modelos Yeezy y Superstar.
De manera puntual, se explica que firmas como Adidas y Google habrían sido utilizadas para engañar a cientos de consumidores, quienes fueron afectados con diversas prácticas maliciosas.
Entre las más frecuentes se encontraron fraudes, estafas, robo de información bancaria, recopilación de contraseñas e implantación de malware, programas que parecen ser legítimos pero que proporcionan de información personal del usuario a un servidor externo.
Así, se estima que, por ejemplo, las actividades maliciosas relacionadas con los virus ransomware, una familia de malware que bloquea funciones en los dispositivos, y cuyos autores piden a cambio un rescate por el equipo habría generado hasta 123 millones de dólares en el año; lo que se traduce en cerca de 2.5 mil millones de pesos mexicanos al tipo de cambio actual.
Este es solo una estimaciones de lo que los problemas de seguridad online suponen para las marcas.
Recordemos que tal y como indican desde el Fondo Monetario Internacional, la frecuencia de los ciberataques año con año sería dos veces más alta, con lo que las pérdidas podrían ser de 2.5 a 3.5 veces más fuertes, o de entre 270 a 350 mil millones de dólares.
Con esto en mente, en tiempos en los que las aplicaciones y plataformas son parte esencial del día a día las empresas tendrán que cuidar con especial énfasis este aspecto, para no ver mayores perdidas de las que la propia pandemia traerá.
Adicional a esto, empresas como Adidas y Google deberán tener mayor cuidado para detectar aquellas situaciones en las que sus logos o nombres son utilizados para estafar a los consumidores.
Y es que este aspecto no sólo genera afectaciones a sus posibles clientes, sino que además se traduce en perdidas en términos de reputación, un aspecto crucial para el negocio.
Recordemos que, de acuerdo con datos publicados por Statista, la opinión de las personas sobre la compañía es el principal factor (94 por ciento) que aporta o afecta la reputación de una compañía, incluso por encima de los reconocimientos obtenidos (88 por ciento) o la publicidad (86 por ciento), situación que toma otras dimensiones si consideramos que el 70 por ciento de las personas asegura que al tomar sus decisiones de compra, la reputación de la empresa que respalda a una es un aspecto fundamental que, incluso, ostenta un mayor valor que las características del producto mismo.